Un rayo cae en la torre de El Salvador

Una carta a los feligreses de la Parroquia de El Salvador, de La Roda.

En la Parroquia tenemos la costumbre de celebrar a los santos, porque son ejemplos del seguimiento de Cristo. Pero debe ser que no le hemos prestado la atención que merece a Santa Bárbara, pues en la madrugada del 14 de agosto, un solo rayo cayó en La Roda, yendo a parar directamente a la torre de la iglesia.

Los testigos, hablan de una luz que convirtió la oscura noche en día y de un estruendo que hizo temblar cristales y puertas. Otros aseguran que vieron caer por el cable del pararrayos, algo que de lejos parecía un manojo de hierbas ardiendo, dejando el fuego y la temperatura, completamente retorcido el grueso cordón metálico que debía proteger la instalación eléctrica de nuestro querido Templo del Salvador. No fue así...

De madrugada comenzamos a recibir llamadas telefónicas de los técnicos de la central de alarmas que nos comunicaban que algo no iba bien.

Tras comprobar que no se había producido ningún incendio, fuimos descubriendo que la inmensa mayoría de los aparatos eléctricos no funcionaban. Testigo mudo de ello es el reloj, que quedó fulminado en el acto, anunciando con sus agujas la hora exacta del desastre que a continuación detallamos:

• Las placas y motores de volteo de las campanas: fundidos.
• La central del reloj y campanas: retirada por los técnicos para intentar repararla.
• El equipo de megafonía: a la chatarra, sin posibilidad de reparación.
• La fotocopiadora: Hay que tirarla.
• Los focos del Sagrario, la Torre, la cancela, el vía crucis: deben ser sustituidos.
• Montacargas del retablo: estropeado.
• Sistema de calefacción: estropeado.
• La central de la alarma: ha habido que poner una nueva.
• Una de las cámaras de seguridad: no soportó la subida de tensión.
• Los aparatos de aire acondicionado: han de ser revisados.

Queremos en primer lugar pedir disculpas por todas las incomodidades que vamos a tener que sufrir hasta que podamos recuperar todos los aparatos. En estos momentos todos los técnicos están preparando informes para remitir al seguro. Esperamos que, aunque en poco, cubramos con la póliza alguno de los tremendos gastos que se nos vienen encima.

Gracias como siempre por vuestra comprensión y apoyo.

Vuestros sacerdotes